SERGIO “HUEVO” RONDINA, UN MERLENSE DE PRIMERA
El último fin de semana Arsenal de Sarandí subió a Primera División, de la mano de su entrenador Sergio Rondina. El Huevo, vecino de Merlo, hincha fanático de Midland y ex jugador del Depo, se ganó un lugar en los corazones de la gente.
La imagen que devolvía la televisión era emocionante, él, el director técnico, llorando de alegría, de desahogo, de satisfacción. A su lado su madre, que nunca había ido a la cancha a verlo, lo abrazaba y lo besaba. Sus dos hijos con camisetas de Arsenal corrían festejando por la cancha de Banfield (estadio donde se jugó la final por el ascenso entre Arsenal y Sarmiento de Junín). Esa postal quedó grabada en los futboleros como un de las más emotivas del fin de semana.
El “Huevo” tiene 47 años y este no es su primer ascenso a la máxima categoría del fútbol argentino. Ya lo había logrado como jugador en el año 1999 con Chacarita Juniors. Es además su segundo ascenso como entrenador, ya que había subido con Villa Dálmine de la B Metropolitana al Nacional B en 2014.
Arsenal le ganó a Sarmiento de Junín 1 a 0 con gol de Garate de penal. De esta manera el equipo del viaducto vuelve a Primera tras el descenso, ocurrido el 1 de abril de 2018, tras 16 años ininterrumpidos en la categoría.
Hace un año el Huevo vivía uno de los momentos más tristes en la historia del club, el descenso, pero el mismo fue el encargado de devolverlo a primera, aunque no se cuelga ninguna medalla «El ascenso es de ellos, los jugadores son los verdaderos héroes de esta hazaña», manifestó en medio de la locura del festejo.
Hombre criado y formado en el ascenso, Rondina, siempre supo hacerse de abajo y trabajar con bajos recursos en sus equipos. Así conformó este Arsenal, un conjunto de jugadores por los que nadie daba dos pesos y terminó siendo la sorpresa. Un plantel conformado por muchos jugadores que la vienen luchando en las categorías menores hace rato, como Maximiliano Gagliardo y Rubén Zamponi, ex arquero y ex defensor de Morón, Ramiro López ex Deportivo Merlo entre otros, o Ezequiel “Pastelito” Cérica, quien supo pasear sus goles por Midland, equipo del cual “El Huevo” es hincha, y nunca deja de ir a ver, salvo que juegue a la misma hora que Arsenal.
Así es Sergio Rondina, un luchador del ascenso, pero también un ganador. Un merlense de Primera.
