SALIDA DE MONDINO DE LA CANCILLERÍA: ENTRA WERTHEIN
El presidente Javier Milei echó a la canciller Diana Mondino porque en la Asamblea General de las Naciones Unidas la Argentina votó en contra del bloqueo a Cuba, alineándose con 187 países y sólo en contra de Estados Unidos, Israel y la abstención de Moldavia. Asume el cargo Gerardo Werthein, el embajador de argentina en Estados Unidos.
La salida de Diana Mondino era un final anunciado por parte del gobierno, tras una seguidilla de traspíes por parte de la cancillería. Desde el inicio del gobierno de Milei, que Mondino no se ajustaba a sus rigurosidades ideológicas.
Según los rumores, Caputo ya había ofrecido el cargo de canciller al secretario de Culto, Nahuel Sotelo, antes del voto sobre el bloqueo a Cuba. La movida refuerza el aislamiento argentino, que vota contra la igualdad de género, la lucha contra el calentamiento global, la defensa de los derechos humanos, lo que en la visión libertaria es parte de un complot colectivista.
La Argentina viene respaldando resoluciones similares desde hace más de 30 años porque sitúa al país en la amplísima coalición de países “razonables” -Alemania, Francia, Italia, España y casi todos los demás- que, en paralelo, apoyan a la Argentina en el conflicto por las islas Malvinas.
Gerardo Werthein ocupará el cargo como hombre de confianza de Caputo y Javier Milei, para salvaguardar los ideales libertarios ante el mundo, lo que previene un aislamiento inminente de Argentina.
La administración Milei dedicó tres párrafos de comunicado para oficializar el despido, pero el texto anticipa una persecución dentro del cuerpo diplomático.
https://x.com/OPRArgentina/status/1851741216926310684
“Esta nueva etapa exige que nuestro cuerpo diplomático refleje los valores de la libertad, soberanía y derechos individuales. En este sentido, nuestro país se opone categóricamente a la dictadura cubana”, dice el texto. “La República Argentina defenderá los mencionados principios en todos los foros internacionales y el Poder Ejecutivo iniciará una auditoría del personal de carrera de la Cancillería, con el objetivo de identificar impulsores de agendas enemigas de la libertad”.