Cerca de las 22 de la noche de este miércoles se desató un incendio en un geriátrico de Villa Urquiza. En el siniestro murieron tres mujeres y hubo que evacuar a 17 residentes, 16 de los cuales fueron trasladados a diferentes hospitales. La mayoría ya fue dada de alta.
Sucedió en el geriátrico Pehuén, que funciona en un edificio de dos plantas ubicado en Bauness 2112, entre Mendoza y Olazábal. Las pericias informaron que se habría originado por una falla eléctrica.
“Se trata de una edificación de planta baja y un piso y terraza. Se desarrolló fuego en una de las habitaciones del primer piso hacia el lateral izquierdo, donde había camas y mobiliarios propios del lugar. En su interior quedó una persona fallecida», contó este jueves el subcomandante Eduardo Jamur, jefe de la Oficina de Siniestros del cuerpo de Bomberos de la Ciudad.
El oficial de Bomberos detalló que las otras dos víctimas estaban en una habitación contigua, ubicada en la parte lateral derecha del frente del edificio. Las llamas no afectaron ese sector, pero sí llegaron los gases de la combustión que provocaron la muerte de otras dos mujeres.
El personal de la Oficina de Investigación de Incendio y Explosión y la oficina de Siniestro trabajó desde la noche del miércoles y continuaba con las pericias en la mañana de este jueves.
«Observamos donde hubo fuego efectivo, que se inició en la parte céntrica de la habitación. Ahí hay una estufa de cuarzo y también un ventilador de techo», contó Jamur. Y explicó que están investigando si el fuego se inició en el piso, lo que permitiría confirmar que fue por la estufa, o en la parte superior, lo que indicaría que el problema fue el ventilador.
“Estamos trabajando, pero todo viene orientado a que el fuego empezó por un problema eléctrico», sostuvo Jamur.
De acuerdo al parte policial, en el geriátrico residían 21 adultos mayores: uno no se encontraba en el lugar en el momento del incendio, otro fue trasladado a su domicilio y 16 fueron derivados por el SAME a los hospitales Tornú, Pirovano, Álvarez, Zubizarreta y Vélez Sarsfield. «Su estado de salud no se vio afectado por el incendio y se encuentran estables recibiendo todos los cuidados por parte de los equipos médicos», indica el comunicado del Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad.
De hecho, Alberto Crescenti, jefe del SAME, dijo desde la escena y ante los medios que incluso quienes inhalaron humo fueron derivados por «control» y «precaución». Desde el Ministerio de Salud porteño confirmaron la mayoría de los internados ya fueron dados de alta y retirados por sus familias, que los llevaron a sus casas particulares.
En la mañana de este jueves, según pudo confirmar Clarín, en el Tornú continuaba internada una mujer de 91 años y de nacionalidad española, identificada como Moraima San Pedro. La trasladaron por precaución, por inhalación de humo, aunque su alta era inminente.
Moraima nunca advirtió que el geriátrico que habitaba desde hace un poco más de dos años se estaba consumiendo en llamas. «Estaba sentada en mi habitación cuando un señor de gorrita abrió de repente la puerta y gritó ‘emergencia’. Creí que había una discusión, una pelea interna porque escuchaba gritos, movimientos y revoleo de cosas. La chica que me cuidaba me ayudó a salir. Me di cuenta de que había un incendio cuando noté el despliegue de ambulancias en la puerta», le confiesa a Clarín con un tono sereno y pausado.