COCA-COLA PIDIÓ EL PROCEDIMIENTO PREVENTIVO DE CRISIS
La planta embotelladora ubicada en Nueva Pompeya, donde trabajan 600 empleados, solicitó el Procedimiento Preventivo de Crisis a través de Femsa Argentina. Esto le permite aplicar suspensiones y negociar despidos pagando menos indemnizaciones.
A raíz de la crisis económica que afronta el país y de la fuerte caída del consumo de gaseosas que se registró en la segunda mitad de 2018, la empresa pidió ayuda al gobierno Nacional para acordar despidos con los propios trabajadores, con asistencia económica del Ejecutivo para cubrir parte de los sueldos de los suspendidos y pagar menos indemnizaciones.
La embotelladora de capitales mexicanos emitió un comunicado a través del cual afirmó que está “atravesando una etapa compleja debido a la desaceleración del consumo, lo que la ha colocado en la necesidad de readecuar su estructura de trabajo”.
Desde el Ministerio de Producción y Trabajo de la Nación, encabezado por Dante Sica, sostuvieron que el pedido “se encuentra en revisión” y que una de las mayores dificultades expuestas por los representantes de Femsa, es el funcionamiento de atención en la bodega de la planta y en el turno de una de las líneas de producto.